Salzburgo cumple 20 años como patrimonio cultural

Salzburgo se prepara para el verano y, entre las mútiples actividades que hacer y lugares que ver, destacan los festivales de ópera y musicales, el deporte alrededor de la ciudad y, cómo no, la buena gastronomía.
Vista del castillo de Salzburgo | Foto: Turismo de Salzburgo
Vista del castillo de Salzburgo | Foto: Turismo de Salzburgo

Salzburgo, la ciudad más bonita de Austria, cumple 20 años como Ciudad Patrimonio de la UNESCO. Y es que sus atractivos culturales dejarían sin palabras a las maravillas del mundo antiguo. Ese casco histórico, estilo barroco, se merece una visita y un buen paseo sin prisas. Este año, las celebraciones vestirán a la ciudad de un ambiente especial y nos brindarán a los visitantes la oportunidad de disfrutar del mejor de los programas. El Gran Festival de música clásica será aun más elegante y cosmopolita que nunca y podremos coincidir con las grandes estrellas del mundo de la ópera y algunas novedades, como el actor austriaco Tobias Moretti (que todos conocemos por ser el policía de Rex) en el papel principal de “Jedermann”. Si esto no es un incentivo, no sé qué más puede serlo.

Al son de Salzburgo

Sí, el que no sepa ya que Salzburgo es la capital mundial de la música es que no la ha visitado. El Festival de Salzburgo (del 21 de julio al 31 de agosto) viene cargado de sorpresas y novedades. Bajo el lema “Despliegue de poder”, el festival ofrecerá óperas, conciertos, obras de teatro y muchas ideas para ilustrar las múltiples facetas de las relaciones de poder en nuestra sociedad. El programa de la ópera arranca con cinco nuevas producciones, tres versiones semi-escénicas y dos versiones en concierto. Sólo por lo original ya se merece un aplauso. Con un nuevo director artístico, Markus Hinterhäuser, que se encargará de las puestas en escena de “La clemenza di Tito”, “Aída” o “Jedermann”, que fue la primera obra que se representó y es la niña bonita del festival.

Si no habéis estado nunca, os recomendamos especialmente la gran Fiesta de Apertura del Festival, el día 22 de julio. Es algo fuera de lo común, pero lo más remarcable de todo es el baile de antorchas que tiene lugar en la Plaza de Mozart. Desde ese momento, la música, el teatro, las exposiciones, los recitales y la danza se despliegan a lo largo y ancho del casco antiguo. Y no olvidéis tomar nota de las Noches del Festival Siemens (27 de julio-30 de agosto), cinco semanas, con entrada gratuita, en las que se proyectan diariamente en una pantalla gigante los momentos estelares del Festival en el casco histórico. Y para los peques de la casa también hay un Festival Siemens Infantil (28 de julio-27 de agosto), de viernes a domingo a las 16 horas de la tarde, con películas de ópera, ballet y teatro. Un total de 195 acontecimientos, en 41 días dan muchas oportunidades para disfrutar y aunque seguramente no podemos atenderlos todos, es casi obligatorio que podamos tomarnos un par de días para asistir y dejarnos sorprender por la magia del Festival.

Y si lo que te gusta es la música contemporánea o vanguardista, entonces visita el Festival Sommerszene. Música y artes escénicas rompedoras e impactantes. Artistas nacionales e internacionales del mundo de la danza, el teatro, el performance y el video-arte. Entre otros, podremos ver la obra de dos de las coreógrafas más conocidas de estos tiempos: la canadiense Louise Lecavalier y la estadounidense Meg Stuart.

Una ración de fotos y una ciudad barroca

Coincidiendo con el Festival de Salzburgo, este año contamos con la Gran Exposición Art Royal, en el Salzburg Museum Nueva Residencia, donde se exhibirán 80 dibujos de la colección del Louvre. Cuenta la Historia que un comerciante alemán que vivía en París recopiló estos dibujos en el siglo XVII. Cuando Luis XIV descubrió semejante colección se volvió loco por comprarla y no paró hasta conseguir los 9.000 dibujos que la formaban. Y precisamente esta exposición está estrechamente relacionada con la muestra “Le Geste Baroque Dessins, esquisses er bozzeti sculptés de Salzbourg” que estuvo en el Louvre hasta enero: 100 dibujos y esbozos del barroco, la mayoría de la colección Rossacher para que se conozca a estos artistas de Austria.

Otra opción cultural, de lo más divertida, es la ruta que sigue los pasos de los príncipes-arzobispo: la Ciudad eclesiástica de Salzburgo. No os dejéis engañar por el título, no tiene nada que ver con la religión, sino más bien con la Historia. Porque la Historia de esta ciudad no se puede desligar de estos dirigentes tan particulares, quienes gobernaron casi durante medio siglo, desde el obispo misionero Rupert, fundador de la iglesia y abadía de San Pedro, hasta Jerónimo de Colloredo-Mannsfeld, mecenas de Mozart y quien convirtió a la ciudad en el centro de la Ilustración. El poder, tanto a nivel civil como a nivel eclesiástico, de estos gobernantes se puede percibir todavía hoy en el número y la importancia de los monumentos arquitectónicos de la ciudad, que fue el factor principal por el que Salzburgo fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad. Las cerca de 50 iglesias, los numerosos edificios, las calles… y todo eso se puede rematar tomando un café en una terraza sintiéndonos por un momento parte de esa Historia.

Y para los que prefieren el mundo actual, el Museo de Arte Moderno expone una muestra de William Kentridge con el título de “Thick Time” en las dos sedes, Mönchsberg y Rupertinum, e incluso incluirá una sección con las obras que ha realizado para teatro y ópera. Y como guinda, este año, presenta la escenificación de la ópera “Wozzeck” de Alban Berg en el festival. Otra divertida exposición será “Alegoría. El lenguaje de las imágenes” en la Galería de la Residencia, que forma parte del Complejo Museístico DomQuartier. El amor, el poder, lo efímero, el vicio y la muerte a través de un conjunto de imágenes que pueden resultar tan hermosas como grotescas. Estará disponible desde el 22 de julio y hasta el 6 de noviembre.

Una pausa para elegir bien

Y después de estas recetas tan intensas sobre la cultura y la música es obligatorio hacer un recorrido por la ciudad siguiendo otros parámetros: naturaleza, deporte, gastronomía y alguna que otra sorpresa. Y es que Salzburgo este año apuesta por el cicloturismo, con más de 170km de carriles-bici. Bajo el título “BIKE + the CITY” podemos conocer la ciudad de una forma muy diferente: una visita al casco antiguo que nos llevará a ver los monumentos más importantes, otra atravesando los verdes campos que rodean la urbe, hasta llegar al Castillo de Hellbrunn (y aprovechar para conocer sus juegos de agua) o la emblemática Iglesia Maria Plain. Para reponer las fuerzas, también podemos optar por hacerle una visita al Mercado tradicional, con el que podemos aprovisionarnos para hacer un bucólico y romántico pic-nic por el camino. Claro que, también podemos hacer una parada en alguno de los muchos restaurantes típicos de la ciudad o, mejor aún, en la cervecería Stiegl, donde encontraréis uno de los muchos y fabulosos jardines de cerveza, los Biergarten.

De hecho, si lo que os entusiasma es el buen comer y la buena cerveza, entonces haced una lista con las once cervecerías de Salzburgo, que elaboran su propia cerveza, lo que convierte a la urbe en “la capital cervecera de Austria”, destacamos: Cervecería Augustiner Bräu, en el barrio de Mülln, o la Cervecería Stiegelkeller justo debajo de la Fortaleza Hohensalzburg. La histórica Cervecería Stiegl, por otra parte, celebrará su 525 aniversario, está preparada para sorprenderos.

Más propuestas: recorred la ciudad a pie y, si lo hacéis a finales de junio, os toparéis con las fiestas del barrio Linzergasse. Música en directo y puestos de comida típica. También podréis descubrir stands con artesanías y diseño en el nuevo mercado Salzachgalerien, a lo largo del río Salzach, un mercado que se celebrará durante los fines de semana de todo el verano. La nueva playa urbana Salzbeach, también es una novedad, en el Parque Volksgarten, que además tiene un nutrido programa de cine de verano, especialmente dirigido a los niños.

Y, por último, una nota de humor. ¿Alguien en la sala va a dar el “sí quiero” próximamente? Pues una forma muy original de hacerlo es al son de “Sonrisas y Lágrimas”, porque ahora es posible casarse en alguno de los románticos escenarios de rodaje de la película. ¿Se os ocurre algo más divertido? Desde luego, con esa filosofía se nos acaban las excusas para no visitar la ciudad.

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