Gran Canaria se vende como destino de turismo interior y senderismo

La isla canaria busca proponer algo más que el tradicional sol y playa, resaltando su peculiar naturaleza volcánica y su turismo más rural.

MADRID.- Gran Canaria también puede ser un destino de senderismo y turismo interior. Para potenciar esta vertiente poco conocida se ha creado Gran Canaria Natural, la marca que reúne a la oferta de turismo rural y actividades en la naturaleza de la isla. La enseña ha dado a conocer en Barcelona el Plan de Competitividad Turística denominado “Islas Canarias, una experiencia volcánica” y que en Gran Canaria se concreta en el proyecto “Senderos entre volcanes”. Y es que la isla quiere venderse como algo más que sol y playa.

Con esta iniciativa, la isla inicia un proceso de formación e información para atraer nuevos nichos de mercado que busquen una naturaleza y un medio ambiente peculiar, con un denominador común: la naturaleza volcánica del archipiélago canario.

A lo largo del acto también se presentó la oferta de senderismo en la que se está trabajando y en la que destaca el programa “Gran Canaria, peregrinación entre volcanes”. Gracias al mismo, el senderista puede obtener en la isla la misma credencial eclesiástica que obtendría al recorrer el Camino de Santiago en su recorrido tradicional en la Península.

Proyecto desde 2009

En una primera fase estarán disponibles cuatro rutas circulares (Circular Roque Nublo, La Caldera de Bandama, Los Tilos de Moya en el parque Natural de Doramas y Circular del Parque Natural de Tamadaba) y 9 rutas lineales (De San Bartolomé a Santa Lucía de Tirajana, De Santa Lucía de Tirajana a Aggüimes, De Santa Brígida a Teror, De Tejeda a la Vega de San Mateo, De Teror a Arucas, De la Cruz de Tejeda a Fontanales, De Fontanales a Teror, De Fagagesto a Agaete, Del Jardín Canario a Las Palmas de Gran Canaria).

Gran Canaria Natural se trata de un proyecto cofinanciado por Turespaña, el Gobierno de Canarias y el Cabildo de Gran Canaria, que se inició a finales del año 2009 y tiene una vigencia de tres años. Con un presupuesto anual que supera los 400.000 euros, el objetivo es llevar a cabo determinados proyectos que pongan en valor el interior de la isla, desde centros de interpretación, recuperación de senderos y caminos, formación para los empresarios de turismo rural y difusión de los valores medioambientales del territorio en cuestión. El colofón será la edición de una Guía de Senderos de Gran Canaria.

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