Renfe entra en la recta final de la transformación de su servicio de Media Distancia

Julio Gómez-Pomar, presidente de la operadora ferroviaria, detalla que la supresión de trenes regionales (Media Distancia) afectará a cerca de 900.000 personas, aunque podrán cubrir esos trayectos eliminados con trenes de alta velocidad o con autobuses.
Tren Avant serie 114 | Foto: Renfe
Tren Avant serie 114 | Foto: Renfe

MADRID.- Renfe suprimirá unas 500 frecuencias de trenes de Media Distancia (regionales) cuando acabe con la reorganización de este servicio, el 15% del total de 3.500 relaciones que presta actualmente, según ha explicado Julio Gómez-Pomar, presidente de la compañía. Estas supresiones afectarán a 900.000 personas, el 5,7% de la demanda total de usuarios de Media Distancia. Gómez-Pomar ha asegurado que en cualquier caso la movilidad de estos clientes está “garantizada”.

Según explicó el presidente de Renfe, parte de las frecuencias de Media Distancia suprimidas quedan cubiertas por otros trenes de Largo Recorrido que pasan por esas poblaciones y que, a partir de ahora, realizarán parada en las estaciones afectadas. Otros enlaces quedarán cubiertos por transporte en autobús.

“Hemos realizado esta reestructuración porque estimamos que poner en circulación trenes para pocas personas es ineficiente y supone malgastar recursos”, ha explicado el presidente de la operadora ferroviario en un encuentro organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE). Renfe prevé ahorrar unos 15 millones de euros a corto plazo con la reestructuración de su Media Distancia y hasta 50 millones a medio plazo. A finales de junio, el proceso deberá estar acabado, según los compromisos del Ministerio de Fomento. También existe la posibilidad de que las comunidades autónomas exploten aquellos trayectos que sean eliminados y que consideren necesarios para los intereses de la región.

Para fijar los trenes a eliminar, el Ministerio de Fomento tuvo en cuenta un informe que concluía que cuando un tren circula con una ocupación inferior al 15% de su capacidad no constituye un modo de transporte “eficiente ni desde el punto de vista económico, ni social y ni medioambiental”. Gómez-Pomar ha detallado que el servicio de Media Distancia tiene un déficit de 238 millones de euros, de los que 189 millones de euros corresponden al servicio de tren por las vías convencionales y los 43 millones restantes al servicio Avant de alta velocidad.

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