Los faros españoles se convertirán en hoteles

Puertos del Estado, gestor de los faros españoles, contempla pedir autorización al Gobierno para que los viajeros puedan hospedarse en los faros costeros. En España hay más de 300 de estas instalaciones.
Faro de Punta Almina (Ceuta) | Foto: Puertos del Estado
Faro de Punta Almina (Ceuta) | Foto: Puertos del Estado

MADRID.- Si alguna vez ha deseado alojarse en uno de los múltiples faros que preñan la geografía española puede estar de suerte. Puertos del Estado, la empresa pública que gestiona estas infraestructuras propiedad del Ministerio de Fomento, ha puesto en marcha el proyecto “Faros de España”, para dar un uso complementario a estas instalaciones y ubicar hoteles en los mismos. Esta práctica es común en países europeos, como Alemania, pero en España no se había explotado esta posibilidad.

Muchos faros españoles se usan para usos alternativos (visitas, fines culturales u hostelería), como es el caso del de Formentor (Islas Baleares), que alberga un restaurante, o el de Finisterre (Galicia), que da cabida en sus instalaciones a una sala de exposiciones. Sin embargo, hasta el momento no se había planteado la implantación del uso hotelero porque esta actividad está restringida. La idea de Puertos del Estado se refiere a los faros tradicionales, en los que existía casa para el farero, ya que los más modernos no incorporan esta instalación.

La empresa pública tendrá que pedir autorización al Ministerio de Fomento y al Consejo de Ministros para posibilitar el uso hotelero de los faros, pero es casi seguro que desde el Gobierno no pondrán ningún tipo de objeción. Después, las autoridades portuarias otorgarían concesiones administrativas a particulares o empresas privadas para explotar los mismos. España cuenta con 387 faros, de los que cerca de 60 están habitados, aunque los técnicos no se dedican exclusivamente al mantenimiento de sus instalaciones, sino que prestan ayuda a la Autoridad Portuaria pertinente.

Entre los objetivos de la iniciativa, que pretende hacer extensibles las visitas a la mayoría de faros, destaca mantener el legado legado histórico-técnico de los faros y transmitirlo a las futuras generaciones, así como contribuir a su mantenimiento y preservarlos de la degradación y el vandalismo.

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