Iberia Express amplía su capital social para seguir operando

La filial de vuelos nacionales y europeos de Iberia cuenta con un capital social de 20 millones de euros tras seis meses de operaciones. Aún sigue el conflicto con los pilotos de la aerolínea “madre”.

MADRID.- Movimientos en IAG, matriz de las aerolíneas Iberia y British Airways, durante el verano. Iberia ha ampliado el capital social de su filial para el corto y medio radio, Iberia Express, hasta los 20,06 millones de euros, según ha quedado registrado en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) del 16 de agosto.

El capital incial de Express, cuando se constituyó en octubre de 2011, fue de 60.000 euros, el mínimo que requiere la ley para una sociedad anónima. En marzo de 2012, cuando la aerolínea se disponía a iniciar sus operaciones, la matriz inyectó 15 millones de euros. Con ellos se cubrirían los primeros gastos operativos.

Ha sido en junio cuando Iberia ha realizado una segunda ampliación de capital de cinco millones de euros en Express. Las ampliaciones de capital no son raras en las empresas en nueva formación, ya que a medida que se va desarrollando el negocio las necesidades de capital son mayores. Por ello, hasta conseguir el equilibrio entre ingresos y gastos, se suelen realizar varias rondas de inversión que cubran los costes y mantengan la compañía en funcionamiento. Los desembolsos suelen depender de las necesidades y de la consecución de objetivos.

Iberia Express, que está volando desde el 25 de marzo, opera 12 rutas nacionales en corto y medio radio y seis rutas europeas (Dublín, Nápoles, Riga, Mikonos, Edimburgo y Ámsterdam). La previsión es la de trabsportar 2,5 millones de pasajeros en 2012. La creación de esta compañía fue un punto de conflicto entre los pilotos de Iberia y la direción, que aún se mantiene. Para finalizar varias huelgas, el Gobierno obligó a ambas partes a someterse a un arbitraje que dio la razón a los pilotos en algunos puntos y se la quitó en otros. El laudo arbitral ha sido recurrido por Iberia al considerar que el árbitro se extralimitó en sus funciones, aunque realmente detrás se esconde la insatisfacción de la aerolínea con el sistema de promoción de los pilotos ideado por Jaime Montalvo, el árbitro del conflicto.

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