MADRID.- El Consejo de Ministros ha aprobado el real decreto que regula el Plan de Impulso al Medio Ambiente (PIMA SOL), cuyo objetivo es ayudar en la renovación de las infraestructuras de los hoteles para que reduzcan sus emisiones de dióxido de carbono (CO2) entre un 40% y un 70%, así como de otros contaminantes: óxido de nitrógeno (NO) y determinadas partículas. Sin embargo, el plan, dotado con 400 millones de euros, sólo beneficiará a 500 establecimientos hoteleros en toda España, según estimaciones del Gobierno. Esta cifra supone un 3% del total de alojamientos hoteleros abiertos: más de 16.000, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE). Eso sin contar alojamientos extrahoteleros, como campings o casas rurales.
La mitad de la inversión que pone en marcha el Gobierno de Mariano Rajoy (PP) está financiada por el Banco Europeo de Inversión (BEI) (presidido por la ex ministra de Fomento Magdalena Álvarez). Las inversiones se canalizarán a través de préstamos a hoteles en condiciones favorables mediante una línea de crédito ya aprobada y a la que se ha sumado el Banco Santander.
El Ejecutivo espera que se acojan al mismo más de 500 establecimientos hoteleros y que la ejecución de las medidas de renovación que se incluyan en el plan facilitará la creación de unos 8.000 empleos, además del mantenimiento de puestos de trabajo de autónomos, pymes y de empresas energéticas y de construcción, según ha explicado Soraya Saénz de Santamaría, vicepresidenta del Gobierno (en la foto).
Por su parte, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente invertirá 5,21 millones de euros en el plan PIMA SOL, que servirán para comprar las reducciones de emisiones de CO2 que se produzcan en los hoteles mediante los proyectos de renovación. El Ministerio que dirige Miguel Arias Cañete aportará unos 10.420 euros por hotel. Estos importes se destinarán a comprar derechos de emisión en el mercado que creó la Comisión Europea hace varios años y en el que también se integran las aerolíneas y, en general, todas aquellas industrias con grandes emisiones de CO2.
Los beneficiarios del plan serán hoteles españoles con proyectos de rehabilitación energética que cumplan las condiciones mínimas establecidas (pymes, empresas o cadenas hoteleras). Entre las medidas incluidas en el Plan se encuentran las de mejora en el aislamiento de fachadas, cubiertas y ventanas que impliquen una disminución de emisiones, así como las relativas a la renovación de los sistemas de monitorización y gestión de los servicios de los establecimientos. También se incluirán medidas de generación de energía renovable para autoconsumo de agua caliente sanitaria y climatización, y otras mejoras de gestión del agua y de los residuos.
La reducción de emisiones en los hoteles no sólo beneficia al medio ambiente, también a las cuentas de resultados de los establecimientos, que verán reducida su factura energética y podrán aumentar su rentabilidad.
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