MADRID.- El Gobierno de Mariano Rajoy (PP) tiene previsto conceder a las empresas del sector turístico préstamos por valor de 318.244.350 de euros, según se refleja en el Proyecto de Presupuestos Generales de Estado para 2012 presentados por Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, en el Congreso de los Diputados. Esta cantidad forma parte del presupuesto de gasto de la Secretaría de Estado de Turismo (presupuesto de 2011 para comparar). Según el informe económico-financiero del proyecto, estos préstamos se articularán a través de líneas de financiación del Instituto de Crédito Oficial (ICO). De toda esta cantidad, 41,24 millones se destinarán a jóvenes emprendedores en turismo y 2 millones irán a parar a las empresas turísticas de la isla de El Hierro, que ha visto su sector afectado por la erupción del volcán subterráneo.
La cifra que ha previsto el Gobierno supone incrementar en un 6,08% los fondos del Plan FuturE que ideó y puso en marcha el anterior Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero. Este es el principal programa de gasto dirigido al sector privado que se contempla en el área de turismo del Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
El Plan FuturE nació como una iniciativa del Gobierno Zapatero cuando Miguel Sebastián era ministro de Industria, Turismo y Comercio para dar liquidez a las empresas del sector en un momento en que los bancos habían cerrado el grifo del crédito. Antes le había precedido el Plan Renove, en 2009, que facilitó cerca de 1.000 millones al sector. Ambos fueron muy bien recibidos por las empresas turísticas, sobre todo los hoteles, que hicieron un uso intensivo del mismo. En la primera convocatoria, que data de 2009, más del 80% de los fondos se destinaron a proyectos en alojamientos hoteleros, fundamentalmente rehabilitación y remodelación.
Recorte del 30%
Es la única buena noticia del Proyecto de Presupuestos presentado por el Gobierno, ya que todo el programa dedicado a la promoción del turismo, donde se incluyen la Secretaría de Estado de Turismo y el Instituto de Turismo de España (Turespaña) sufren un hachazo del 29,7% en sus gastos. Hay partidas significativas, como los fondos para el Fomit (el programa para los destinos maduros) que se ven recortados en cantidades superiores. También es cierto que el turismo es una competencia cedida a las comunidades autónomas y que la mayor parte de la promoción corre a cuenta de las mismas, aunque los programas de ayudas suelen ser una prerrogativa estatal.
Así, el presupuesto total para Coordinación y promoción del turismo en 2012 es de 438,2 millones de euros, frente a los 623,25 millones de 2011. Aquí se incluyen todos los gastos y programas de la Secretaría de Estado y del Instituto de Turismo. Y es en el capítulo de ayudas donde queda más clara la política del Gobierno, orientada al sector privado. Así, el Fondo Financiero del Estado para la Modernización de las Insfraestructuras Turísticas Maduras (Fomit) sólo tiene presupuestados 250.000 euros, un 99,8% menos con relación a 2011, cuando esta partida contó con 145 millones. Sin embargo, el Gobierno ha dotado una partida denominada “sostenibilidad en Destinos Maduros” con 3,32 millones de euros (frente a los 7 millones de 2011) y otra para “planes de recualificación integral de destinos turísticos” con 3 millones (en comparación con los 4 millones de 2011).
Es decir, que los municipios turísticos que quieran readecuar su oferta se las verán y se las desearán para financiar los proyectos. El mantra que se ha venido repitiendo en los últimos años ha sido el de la colaboración público-privada: que la inversión se realice tanto por el sector púbico como por las empresas privadas. De nuevo, habrá que ver cómo se articulan estas políticas a la espera del Plan Integral de Turismo que prepara la Secretaría de Estado.
¿Qué desaparece?
Del presupuesto para 2012 desaparecen partidas que han sido bandera en la política del Gobierno socialista. Para empezar, se elimina el programa de Turismo Social Europeo, el Imserso para Europa que traía turistas de otros países a España en temporada baja, que en 2011 estuvo dotado con 4,5 millones de euros. Esta fue una de las iniciativas del ministro Sebastián que tanto se promocionaron y funcionó bastante bien a juzgar por los resultados presentados por el anterior Gobierno. Los más afectados por esta supresión serán las agencias de viajes que se hacían con el concurso para vender los paquetes y los hoteles que se aprovechaban de los jubilados europeos que llegaban gracias a la iniciativa en temporada baja.
También se eliminan convenios con ayuntamientos, como el que dio al consistorio de Ourense (Galicia) 1 millón de euros en 2011 para realizar inversiones relacionadas con el Plan Estratégico Termal. Eso sí, se mantienen las subvenciones para la campaña anual de baneras azules (aunque se reduce de 70.000 euros a 50.000 euros su presupuesto) y se dan nuevas ayudas a Acevin (Rutas del Vino [50.000 euros]), Asociación Saborea España (120.000 euros) y a la Asociación Española de Estaciones Náuticas (30.000 euros).
