MADRID.- En un contexto bastante apretado para las compañías aéreas, Air Nostrum, franquicia de Iberia para los vuelos regionales, ha conseguido 18,3 millones de euros de beneficio en 2010, frente a las pérdidas de 16,2 millones que obtuvo un año antes. La firma achaca este resultado a la “ejecución del recorte de costes contemplado en las medidas del plan de acción contra la crisis”, que ha logrado combinar con la modernización de su flota, según ha explicado en un comunicado enviado a los medios.
Los ingresos de Air Nostrum llegron a los 528 millones de euros, un 5,95% menos que en 2009. En general, las principales magnitudes de Air Nostrum disminuyen, ya que los viajeros transportados en 2010, que llegaron a los 4,38 millones, son un 6,4% menos. Estas reducciones son producto de la estrategia de la aerolínea de reducir su producción para aumentar la rentabilidad. Y es que en 2010, Air Nostrum operó 123.909 vuelos frente a los 136.099 del año precedente. No obstante, la firma aumentó el ingreso medio por pasajero y la ocupación de los aviones, hasta el 61,6%.
Así, la reducción de costes y de la capacidad ofrecida han conseguido llevar a la compañía a los números negros. A pesar de los beneficios, Air Nostrum asegura que ciertos eventos sucedidos en 2010 han impactado negativamente en su cuenta de resultados, como la nube de ceniza volcánica de abril y mayo y las continuas protestas de los controladores aéreos, con su paro en diciembre.
Por otro lado, la compañía aérea ha comenzado a incorporar a su flota nuevas unidades del reactor CRJ1000, el avión regional más moderno con capacidad para 100 pasajeros. Estos nuevos modelos, que sustituyen a los aeroplanos de 50 plazas, permiten reducir en un 32% el coste por asiento y suponen un ahorro de combustible y disminución de emisiones de CO2 por su eficiencia y menor peso, según la compañía.
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