MADRID.- El portal de alquiler de alojamientos Wimdu.es llega a España con más de 15.000 establecimientos internacionales en su portafolio. Giuseppe Mozzillo, cofundador y director ejecutivo de la marca en nuestro país, ha querido dejar claro en la presentación que este portal no es uno más entre la variedad de directorios de alojamientos que se pueden encontrar por Internet. “Wimdu es una plataforma que conecta anfitriones con huéspedes”, ha explicado Mozzillo. A diferencia de otros modelos, el funcionamiento de Wimdu se basa en las redes sociales: el usuario interesado en conocer los alojamientos de que dispone debe registrarse en la web, facilitando sus datos. Una vez realizado este paso, el futuro huésped podrá alojarse en una casa en el árbol, grúas o pisos más normales en el centro de las principales capitales.
Mozzillo no ha revelado el número de alojamientos con los que cuenta la firma en España, ya que están operando en nuestro país desde hace un mes escaso. Aunque sí ha indicado que en un año quieren ofrecer 10.000 alojamientos (en Madrid ya son más de 200 los pisos que se alquilan a través de la plataforma). Detrás de Wimdu, creada en Alemania en marzo de este año, se encuentran los inversores Rocket Internet y Kinnevik, que han aportado 90 millones de dólares al proyecto. Esto ha facilitado la rápida expansión de la firma, que ya cuenta con 400 trabajadores en todo el mundo, según su fundador.
El modelo de Wimdu pretende potenciar la calidad más que la cantidad. Los propietarios interesados en anunciar sus pisos deben especificar un conjunto de datos obligatorios, así como aportar fotos claras que “vendan” el alojamiento. Además, el propietario debe velar por atender debidamente al huésped. Las malas opiniones por la baja calidad de los alojamientos penalizan, pero Wimdu se pondrá en contacto con el propietario para corregir los defectos. Por su lado, los huéspedes que muestren un mal comportamiento también pueden ser eliminados de la plataforma. Es decir, la confianza es la base de este portal y de su servicio.
Asimismo, Wimdu no establece un perfil tipo del alojamiento que puede incorporarse a su plataforma, excepto los estándares de calidad mínimos. Asimismo, los precios, que fijan libremente los propietarios, tampoco son estratosféricos. Giuseppe Mozzillo ha comentado que este tipo de alquiler es más beneficioso para las personas que abandonan su residencia por temporadas, por ejemplo: en vacaciones o por cuestiones de trabajo. Así, tienen la opción de alquilarla y de obtener un rendimiento de ella. Este modelo tendrá que luchar con la desconfianza que en España genera el mercado del alquiler, sobre todo en las primeras residencias.
Por su parte, el modelo de negocio de Wimdu se basa en cobrar un porcentaje al propietario (3%) y al huésped (12%) por la reserva. Además, para evitar fraudes, el pago al propietario no se realiza hasta pasadas 24 horas de la entrada del inquilino en el alojamiento. Con ello se evita el anuncio de pisos falsos o diferentes a los ofertados. En lo que se refiere a la competencia en nuestro país, Mozzillo ha comentado que “otros portales son muy locales y no pueden garantizar una presencia global”, a lo que ha sumado como punto de diferenciación que “muchos competidores no funcionan como red social, sino como portal de clasificados”.
Entiendo que la llegada de portales como Wimdu al panorama turístico nos beneficia a todos ya que proporciona una opción alternativa a los hoteles.
En mi caso particular (soy propietario de una empresa operadora de apartamentos turísticos) creo que Wimdu podría llegar a establecerse como una importante herramienta para nosotros a modo de un amadeus o sabre como los que usan los hoteles como centrales de reservas.
Los hoteles y touroperadores hasta ahora nos han estado complicando la entrada en estas centrales de reservas por la incipiente competencia que nuestro negocio puede suponer para ellos, por lo que poder contar con aceleradores de reservas como estos creo que va a contribuir enormemente a que nuestro negocio pueda darse a conocer y a mejorar en todos nuestros procesos.
Mi nombre es Germán Espitia y estoy inscrito como proveedor de servicios de alojamiento en WIMDU del que estoy tramitando mi retiro. La razón, WIMDU contrató a mi hija como fotógrafo oficial. La gran mayoría de las fotos de Bogotá y sus alrededores fueron tomadas por mi hija durante más de tres meses de abnegado trabajo, poniendo ilusionada el tiempo, los equipos y el transporte confiando en la honorabilidad de esta empresa. Ella aplazó sus estudios para poder comprometerse y cumplir con WIMDU durante todo este tiempo.
Lamentablemente y a pesar de existir un contrato de por medio (el cual se logró después de mucha insistencia y que se dignaron a enviar para que mi hija lo firmara tan solo hasta el pasado 11 de julio, que además a todas luces solo favorece los intereses de WIMDU con las leyes de Alemania); NO LE HAN PAGADO EL DINERO CORRESPONDIENTE POR SU TRABAJO Y SIN MOSTRAR SEÑALES DE INTERES ALGUNO EN HACERLO.
Confieso que desconozco cuales fueron las condiciones y que pasó con los fotógrafos de las demás ciudades de Colombia.
Como comprenderán moralmente es inconcebible que yo continúe teniendo relaciones comerciales con los que robaron a mi hija.
Además si eso pasó con unas fotos, que garantía hay de que me respondan con los pagos por los servicios prestados a los clientes?. Solo quiero que recapaciten al momento de hacer negocios con esta empresa, ya sea como clientes o como proveedores de servicios de alojamiento, porque es muy injusto que vengan extranjeros y se aprovechen de la vulnerabilidad y necesidad de los latinos; pues no tenemos quien nos defienda. Solo quiero por lo menos que se conozca de este atropello.
Es una idea interesante. La verdad es que esta bien por que los precios son bastante competitivos.