MADRID.- Esta semana se ha conocido la apertura de juicio por varios delitos de dos de los principales directivos del Grupo Playa Sol, uno de los conglomerados hoteleros más potentes de la isla de Ibiza y que se encuentra en concurso de acreedores, aunque sigue funcionando. Fernando Ferré tendrá que afrontar en juicio una petición de 81 años de cárcel (el empresario y se encuentra en prisión), mientras que Josep Oller, el otro imputado, tiene una petición de 14 años y medio. Para ambos, Santiago Pinsach, magistrado del Juzgado de Instrucción número 4 de Ibiza, ha fijado una fianza de 48,57 millones de euros.
Los responsables de Playa Sol se encuentran en prisión preventiva para evitar su fuga o la destrucción de pruebas porque el juez ha encontrado indicios racionales de delito. Por lo tanto, hasta que se celebre el juicio y haya una sentencia desfavorable, son inocentes. Lo que hay de momento son unas imputaciones de delitos bastantes graves que habrá que demostrar en el juicio que se celebrará en los próximos meses. El auto de apertura de juicio oral al que ha tenido acceso este medio, fechado el pasado 28 de enero, detalla los delitos que la fiscalía, la abogacía del Estado, la abogacía de las Islas Baleares, y las acusaciones de los sindicatos CCOO y UGT han realizado contra los dos imputados.
Tanto a Fernando Ferre como a Josep Oller se les acusa de 7 delitos contables, 24 delitos contra la Hacienda Pública (por los Impuestos de Sociedades, IVA, IRPF y del Patrimonio), 8 delitos contra la Hacienda Pública de Baleares, 4 delitos por reclutar trabajadores con contratos ilegales, 4 delitos por la contratación con condiciones laborales que perjudican sus derechos, 4 delitos por la falta de higiene en los establecimientos de los trabajadores, 3 delitos por falsedad en documento mercantil y 3 delitos por falta de contabilidad veraz de las sociedades. Todo esto a cada uno de ellos. Si el tiempo solicitado de prisión varía para cada uno de ellos es porque a Ferre se le considera autor y a Josep Oller se le considera cooperador necesario.
Por lo que se deduce del auto, el Grupo Playa Sol contrató a trabajadores en sus países de origen de forma ilegal, con condiciones laborales que infringían las leyes españolas y acomodándolos en apartamentos que carecían de las mínimas condiciones de higiene. Además, el Grupo habría evadido los principales impuestos: Sociedades, IVA e IRPF. De hecho, según alguna de las acusaciones, la contabilidad de Playa Sol no era veraz. Es decir, un presunto desaguisado que se tendrá que demostrar en el Juzgado de lo Penal de Ibiza al que les corresponda sentenciar sobre este tema.
El Grupo Playa Sol cuenta con más de 40 años de existencia en Ibiza, dispone de 21 alojamientos en Ibiza, nuevo hoteles y el resto apartamentos. Además, en San Antonio de Ibiza el grupo también dispone de 23 alojamientos, lo que da idea de su envergadura.
