Agazapada entre Zamora y Portugal, la Denominación de Origen Monterrei se va haciendo un hueco en el mercado del vino. Aunque en la provincia de Ourense se vendimia desde la época romana, los caldos de Monterrei empiezan a despuntar ahora, con unos 618 viticultores que plantan sus vides en 720 hectáreas de esta comarca gallega.
La maquinaria propagandística de los Ribera del Duero o los Rioja hace que muy pocos sepan que Galicia cuenta con cinco denominaciones de origen: Rías Baixas, Ribeiro, Ribeira Sacra, Valdeorras y Monterrei. Esta última nació en noviembre de 1994, pero las investigaciones han datado en época romana la primera producción de vino en la región que hoy comprende municipios como Verín, Castrelo do Val, Oimbra y el propio Monterrei.
Y es que en la zona se han encontrado lagares (complejos que se excavaban en la piedra para prensar la uva y obtener el mosto) y vasijas para el traslado de los caldos. Y, desde finales del siglo IX, se expande el cultivo de la vid por toda la comarca gracias a las órdenes religiosas, que en ese momento eran las que se ocupaban de estos menesteres en los reinos medievales de la Península ibérica.
Bodegas Crego e Monaguillo
Meraki TV Travel, el canal de televisión digital de Viajesdeprimera.com y Revista80dias, ha podido conversar con Ernesto Rodríguez, gerente de Bodegas Crego e Monaguillo, incorporada a la DO Monterrei, quien explica que la bodega se encuentra en “una zona de Galicia privilegiada, porque estamos cerca de la cuenca del Duero”. Al igual que en otras regiones peninsulares, Rodríguez añade que el vino de Monterrei “siempre fue para el autoconsumo, ya que se usaba el vino a granel hasta hace aproximadamente 20 años”.
En Crego e Monaguillo se elaboran tres vinos tintos (Crego e Monaguillo, Father 1943 y Mandamientos) y dos blancos (Crego e Monaguillo y Marova). Father es uno de los mejores vinos que se producen en la bodega, pero Rodríguez revela que no todos los años se comercializa, ya que debe cumplir unas condiciones de calidad máxima que no se dan en todas las añadas.
Nombres y denominación recuerdan el tiempo en que los cregos (los clérigos en gallego) vendimiaban los racimos que parían las vides de estas tierras. Y, como resultado, unos tintos impactantes en el paladar, sabrosos y con unos matices frutales muy complejos en el sabor y el regusto que dejan. Las uvas que podemos encontrar en Monterrei son las Mencía (tintas), Treixadura, con la que se elabora el Father, y el Godello o Verdello para los caldos blancos.
El vino de Monterrei llegó a comercializarse en América, mercado en el que actualmente también tiene una importante presencia. Gaspar de Zúñiga Acevedo y Velasco, quinto Conde de Monterrei (1560-1606) fue nombrado por Felipe II virrey de la Nueva España. Allí, De Zúñiga fundó la actual ciudad mexicana de Monterrey e introdujo el vino de su comarca, seguramente como recuerdo de sus posesiones en la península ibérica y no con el objetivo de comerciar con el mismo.
