MADRID.- Nada nuevo en la estrategia turística que el Gobierno pretende seguir a lo largo de 2013. Al menos en lo comunicado a la Comisión Europea en el Programa Nacional de Reformas para este ejercicio. Según el mismo, el Plan Nacional e Integral de Turismo (PNIT) es el instrumento que seguirá el Ejecutivo de Mariano Rajoy (PP) para “mejorar la competitividad del sector” como “motor de la economía española”.
Según el documento enviado a Bruselas, el PNIT (PDF) tiene como prioridad “generar una oferta turística de calidad, diversificar la demanda en el tiempo y en el espacio y crear el marco adecuado en el sector para garantizar su accesibilidad y valor añadido”. José Manuel Soria, ministro de Industria, Energía y Turismo, ha recalcado en varias oportunidades que el plan ya se ha ejecutado al 39%. De momento, según el Programa Nacional de Reformas, se han puesto en marcha las 28 medidas que forman este plan.
El Ejecutivo recalca los avances en áreas como la representación de los intereses turísticos de España en la Unión Europea, la captación de mercados emergentes, la flexibilización en los visados para algunos mercados, la incorporación de nuevas tecnologías o la homogeneización en las clasificaciones de turismo rural y campings, entre otras.
Nada más se dice del turismo en el Programa, un sector económico que genera el 10% de la riqueza de España (más de 100.000 millones de euros) cada año, según los datos del Instituto Nacional de Estadística, y da empleo a casi 2 millones de trabajadores. Tampoco explica el Gobierno cómo actuará para estimular la demanda entre el turista nacional, muy atenazado por la crisis, y revertir la, de momento, pequeña pérdida de turistas extranjeros a nuestro país.
