El zelote: la vida y la época de Jesús de Nazaret, por Reza Aslan

Un estudio sobre la figura histórica y la época de Jesús de Nazaret, donde se abordan cuestiones sobre sus mensajes, sus seguidores, su significación política y la importancia que le dieron los romanos en su momento.
El actor Willem Dafoe caracterizado como Jesús de Nazaret
El actor Willem Dafoe caracterizado como Jesús de Nazaret
El actor Willem Dafoe caracterizado como Jesús de Nazaret
El actor Willem Dafoe caracterizado como Jesús de Nazaret

Hablar o escribir sobre las incógnitas que rodean a Jesús de Nazaret siempre causará polémica. ¿Cómo las enseñanzas y prédicas de un agricultor analfabeto de la Galilea han podido convertirse en una religión con millones de seguidores en todo el mundo y que ha determinado la historia del continente europeo? A esta pregunta, entre otras, intenta responder El zelote: la vida y la época de Jesús de Nazaret (Indicios, Ediciones Urano, 2014), del autor y profesor iraní Reza Aslan. Tras más de 2.000 años de intoxicación y manipulación, los cristianos e incluso quienen no lo son, pero han nacido en países de tradición cristiana, han olvidado la figura del Jesús histórico, creyendo que el mesías de los Evangelios y de la interpretación de la Iglesia católica es el verdadero. Pero nada más lejos de la realidad, como recuerda Aslan en su libro.

Jesús fue uno más de los mesías que surgieron en la Palestina del siglo I de nuestra época, una región bajo dominio romano y que sería exterminada por el emperador Vespasiano en el año 70 de nuestra era. Además, Jesús nació en el seno de una familia judía, que repetaba y llevaba a cabo las tradiciones típicas de esta religión. La afirmación de que fuese analfabeto y no supiese escribir no está demostrada, ni mucho menos. Bien al contrario, está demostrado históricamente que en las sinagogas judías se enseñaba a los niños la lectura de los libros religiosos y también la escritura. Así que es igual de probable que Jesús fuese analfabeto, como que no lo fuese. El libro de Aslan se centra en la figura histórica del Galileo nacido en la aldea de Nazaret y no entra a discutir los dogmas de la fe cristiana. Sin embargo, sí que se interroga y lanza respuestas e hipótesis sobre los mensajes de Jesús, el comportamiento de sus seguidores, la significación política del nazareno y la importancia que le dieron los romanos en su momento. En realidad, Jesús pasó desapercibido en su tiempo histórico y sería la posterior maquinaria de sus seguidores la que puso en valor su figura y su mensaje… reinterpretado.

Aslan lleva más de 20 años dedicado al estudio de las religiones, por lo que es todo un experto y su trabajo descomunal de documentación histórica se nota en El zelote. Las descripciones de la época histórica, las costumbres y las normas no se hacen nada pesadas y logra pintar un cuadro de la Palestina de Jesús muy exacto y con pocas fisuras. Sin embargo, a nuestro juicio, el uso que se hace del Nuevo Testamento en el libro no es apropiado. No se puede menospreciar un texto evangélico en muchos pasajes de la obra y, después, usarlo como referencia histórica de lo que debió sucederle a Jesús. O se considera a los Evangelios como un texto con simple valor religioso, de doctrina, o como documento histórico, pero no ambas cosas. No es que no pueda seguirse este camino, es que son muchos los expertos que consideran que los evangelios carecen de rigor histórico. Se trata de textos escritos años después de la crucifixión de Jesús de Nazaret, por discípulos que no tuvieron trato con él. Y, además, son textos que han sufrido adiciones y manipulaciones a lo largo de la historia. Es buena idea usar los Evangelios como excusa para hablar sobre la época de Jesús o sobre acciones que pudieron ocurrir, pero no para dar por hecho sucesos de su vida.

Otro apartado interesante del libro es el que se dedica a explicar cómo surgió el cristianismo. Jesús no tenía intención de crear una iglesia y mucho menos una religión, por mucho que se empeñe la Iglesia católica en decir lo contrario. Los hechos históricos son los que son. Saulo de Tarso, un fariseo judío de Jersusalén, perseguidor de los cristianos, se convirtió a la creencia en la figura de Jesús, dando nacimiento a Pablo. Fue este antiguo fariseo quien modificó y tergiversó el mensaje de Jesús, al que no había conocido en persona, difundiéndolo entre los extranjeros y a lo largo de todo el Mediterráneo. Tal fue su demarraje, que Santiago el Justo, hermano carnal de Jesús y continuador de su culto en Jersualén, le llamó al orden. Se inicia un cisma en la incipiente religión, que sólo se decantará a favor de las enseñanzas de Pablo cuando Jerusalén y el concilio apostólico dirigido por Santiago sean arrasados por las legiones romanas tras la revuelta iniciada en el año 70. Santiago seguía la figura de su hermano en Jersualén, de facto fue su continuador, pero repetaba las tradiciones y la religión judía. De hecho, el hermano de Jesús nuncá pensó que el mensaje de quien consideraba el mesías estuviese lanzado para crear un nuevo credo, sino para amoldarse y modificar el de la religión judía.

Jesús fue un judío, con toda la implicación que esto tiene, pero también una figura histórica. Ya se ha superado la etapa, iniciada por la Ilustración, en la que se ponía en duda la propia existencia de Jesús de Nazaret. Habría sido una invención, decía esta teoría. Los diferentes estudios y diversas fuentes romanas y judías han demostrado la realidad de la existencia de una persona llamada Jesús de Nazaret al que se atribuía la denominación de mesías. Porqué su mensaje caló hondo y se impuso como religión oficial en todo un continente tiene que ver con la adopción del emperador Constantino del cristianismo como credo del Imperio Romano, pero también por la labor de proselitismo de sus apóstoles. Un proselitismo casi ciego y arrollador.

2 comentarios
  1. Interesante planteamiento sobre la figura de una persona que no sólo ha modificado la realidad del continente europeo si no la del mundo entero. Evidentemente, su mensaje fue uno pero el éxito de su supervivencia ha corrido por cuenta de quienes lo han ido heredando, no sólo en un primer momento, si no en siglos posteriores. Por cierto que en el último libro de Javier Sierra, La pirámide inmortal, se plantean los conocimientos que pudo adquirir Jesús durante su estancia en Egipto, una especie de agujero negro del que apenas hay información en las Sagradas Escrituras y que tal vez se aborde de alguna manera en El Zelote.

    1. Los años ocultos de Jesús, que los evangelistas no cuentan, siguen siendo un misterio, aunque teorías de todo tipo. El Zelote no los aborda, de hecho, la teoría de Aslan es que Jesús era analfabeto… Los Evangelios Apócrifos aportan algo de luz en este sentido, pero, al igual que los canónicos, estos textos también adolecen de múltiples variaciones y modificaciones. Hay indicios en las palabras de Jesús y en las tradiciones de las sectas que, en teoría, siguieron su mensaje de forma más pura, sobre las influencias del Galileo, pero son difíciles de demostrar…

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