Emigrar y trabajar en Australia sin morir en el intento (y II)

¿Cómo se vive, se trabaja o se tributa en Australia? Aquí te lo explicamos para que no te pierdas nada y empieces con buen pie.
Sídney - foto de ONT AUSTRALIA
Sídney – foto de ONT AUSTRALIA

MADRID.- Siguiendo con los consejos que ya dimos en la primera parte de este artículo para emigrar y trabajar en Australia, completamos la serie. Como el Student Visa es el más utilizado y práctico, vamos a tomarlo como referencia para nuestro viaje.

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Bien, ya tienes todos los papeles en regla, sea visado de turista o de estudiante. Nos embarcamos en un vuelo hacia el otro lado del mundo. Imaginemos que queremos ir a Sydney. Si salimos desde España es un viaje largo de más de 14 horas con al menos una escala. Un vuelo de ida puede rondar los 900 euros. Lo que debes tener muy en cuenta al llegar es que la aduana australiana es muy minuciosa con las cosas que no puedes llevar en tu maleta. No dejan pasar productos biológicos (comida o semillas, por ejemplo) foráneos, ni tampoco artículos de madera que no hayan sido tratados.

Asimismo, antes de pasar el control de aduana, te preguntarán si tienes algo que declarar (medicinas, artículos de mucho valor, dinero en efectivo superior a 10.000 dólares). Lleva tu documentación en regla y deja claro que vienes a estudiar/pasar las vacaciones; así que antes de ir lleva suficiente dinero (efectivo, crédito o travelchecks). Ir a Australia durante 6 meses con sólo 1.000 dólares no es una buena idea… Bien, acabas de salir de aeropuerto y has pisado Sydney ¿Qué hacemos ahora? Pues irnos a la city ya sea en tren (15 dólares) o en taxi (30 dólares) a Central Station

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Alojamiento

Lo más aconsejable es alojarse en un hotel o en un backpackersaccomodation (hostal) durante los primeros días mientras buscamos un sitio permanente. El alojamiento en Sydney es caro, muy caro, por eso la opción más barata es quedarse en un backpacker (20-30 dólares la noche). Son pequeños hostales llenos de mochileros con habitaciones de literas donde puedes conocer gente “interesante” de todas partes del mundo. Hay muchas por la zona de Kings Cross o Central Station. La opción del hotel sale más cara, pero los hay en toda la ciudad.

Sydney es una ciudad de 3 millones de habitantes y la gente suele residir más en casas que en pisos, por lo que su extensión es considerable y el precio de la vivienda es caro. Alquilar una casa amueblada de tres habitaciones puede rondar los 700 dólares a la semana. Lo más recurrente es buscar alojamientos compartidos en anuncios de la calle o internet (gumtree). Puedes compartir una habitación de dos camas por 125 dólares a la semana con otro inquilino, o puedes tener una habitación propia por no menos de 200 dólares semanales (gastos incluidos) dependiendo de la zona (más cerca del centro o más cerca de la playa sube el precio). Si buscas por Sydney puedes encontrar buenos barrios por Newtown, Gleebe, Redfern, City CBD, Radwick, Chippendale. O si prefieres estar en la playa tienes Manly, Coogee, Bronte Beach y Bondi Junction.

La gente suele mandar mensajes de móvil a los anuncios y el propietario responde con un SMS para pactar un día y una hora para ver los apartamentos (por eso te aconsejamos conseguir una tarjeta PIN si no viajas con tu propio móvil). Se suele pagar una fianza de dos semanas de alquiler. Aproximadamente, una habitación puede salir por 800 dólares al mes  (unos 700 euros). Tómate tu tiempo y mira detenidamente todos los anuncios que veas por internet, al menos 10 alojamientos antes de cerrar un trato y cuidado con los timos (que los hay). Siempre hay que conversar con el casero cara a cara y siempre tras acceder al piso. Cuando empieces a trabajar verás que lo que ganas te da para costearte el alojamiento y vivir. En Australia los salarios están mejor equilibrados que en España.

Trabajo

Lo primero es darte a conocer en Hacienda. Necesitas un TFN (TAX FILE NUMBER) si quieres trabajar legalmente en Australia. Es algo similar al número de trabajador-cotizante para que puedas pagar tus impuestos. Con tu visado de estudiante has de dirigirte a la oficina de impuestos (Taxagency) para que te den de alta como trabajador y te den tu TFN. En Australia se paga un IVA (GST) de un 10% en la mayoría de productos. También existe la opción de ser trabajador autónomo, por lo que tendrías que solicitar un ABN number (número de trabajador autónomo). Sea cual sea tu opción, empieza con el papeleo. Es sencillo y se tarda poco. Una vez lo tengas ya puedes ser contratado por cualquier empleador y empezar a trabajar legalmente tus 20 horas semanales como buen estudiante legal. Porque, si descubren que estás trabajando ilegalmente en Australia, a tu jefe le multarán y a ti te echarán (literalmente) del país, prohibiéndote la entrada durante dos años.

El Gobierno australiano busca profesiones especializadas, pero aun así, el mercado de trabajo es amplio y variado. Es un país que produce mucho sector primario y servicios. Con una tasa de desempleo de alrededor del 8%, existe una amplia gama de ofertas de trabajo al que puedes optar a tiempo parcial. Desde babby sitter o aupair (niñera), pasando por camarero, restauración, granjero, peluquero, carpintero, hasta trabajar en la construcción. Muchas de estas ofertas requieren experiencia e inglés y en otras no. La ciudad tiene un sinfín de cafeterías y restaurantes donde siempre buscan gente para trabajos de media jornada.

Se puede empezar cobrando desde 15 dólares hasta 30 dólares por hora o más. Si haces cuentas, puedes ganar unos 300 dólares a la semana con salarios bajos. Australia es un país multicultural en crecimiento con una larga tradición inmigrante. Todo lo que quieras conseguir a partir de aquí, depende de ti.

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El sueño de todo emigrante es conseguir que la empresa en la que trabaja le esponsorice y le den la visa permanente. Así habrá cumplido su sueño australiano.

Cosas de Sydney

Es fácil encariñarte con la ciudad. Sydney es como San Francisco mezclado con Nueva York, pero con un tono más rancio. Es una civilización a la que le gusta el deporte y los parques al aire libre (hay muchos por toda la ciudad). Será por ello que el tabaco cuesta a 18 dólares el paquete… Así que es una ciudad ideal para ponerse en forma, hacer footing, apuntarse al gimnasio, leer al aire libre, tomarse un caffelatte en cada esquina, etcétera.

La comida es barata en Sydney. Australia protege mucho su producción agrícola y ganadera, por lo que la cesta de la compra no suele ser cara. El precio medio está en los 70 dólares semanales. No hay muchos supermercados a los largo de la ciudad, pero eso no es problema, ya que existen tiendas de conveniencia (7 eleven) en cada esquina, donde se puede hacer la compra las 24 horas del día. Lo que sí es cierto es que es muy difícil encontrar gastronomía autóctona australiana. La ciudad ha sido colonizada en su mayoría por comida asiática y franquicias de restaurantes. La gente es adicta al sushi y a la comida americana. Hay donde elegir. Encontrarás australianos y asiáticos (chinos, japoneses, taiwaneses).

Para moverse por Sydney se usa el tren (7 líneas), los autobuses y los ferrys para atravesar la bahía. Suele costar 3,60 dólares el trayecto. Y los ferrys, 5 dólares. La vida de Sydney se encuentra en la zona sur, en la City, los alrededores son suburbios residenciales con pocos atractivos turísticos. En Australia la gente empieza a cenar sobre las 7 de la tarde en pubs (hay pocas discotecas) y todo cierra a las 4 de la madrugada. Para verlo de otra forma, tienen el mismo sistema de diversión que los británicos (es decir, su diversión es beber, beber y beber). De ahí que podrás ver muchos pubs abarrotados con música en vivo mientras la gente cena, bebe y baila en el mismo local. Es por ello que el gobierno australiano ve el consumo de alcohol como una lacra de la sociedad y lucha por combatirla. Por eso, está prohibido beber en las calles de la ciudad.

No hay delincuencia (al menos no mucha). Sydney es una ciudad segura. La gente es muy amable y samaritana. El único posible peligro son los borrachos de la calle que vuelven a sus casas y que pueden incordiarte, nada más. Aparte de eso, el único susto te lo puede dar la fauna local (exacto: ¡las cucarachas!). Asimismo, haz caso de las advertencias de los guardacostas cuando se trate de tiburones o medusas. Los hay y pueden atacar. También los cocodrilos por la costa del mar.

Otra cosa de la que debes cuidarte es la radiación solar. En Australia se toman eso en serio. Notarás como los rayos solares son… diferentes. Usa protector solar cuando vayas a la playa y cúbrete la cabeza. Por eso verás muchísimos sombreros de ala ancha tipicalaussie, parecidos al del famoso “Cocodrilo Dundee”.

La conclusión es que si eres una persona a la que le gusta tener todo sobre seguro y fácil, quédate en la UE. Si en cambio posees un espíritu aventurero indomable, Australia es para ti.

2 comentarios
  1. buenas tardes les escribe Freddy Colmenares 24 años de edad de Venezuela, soy ingeniero petroquímico y actualmente ejerzo el cargo de Inspector de Seguridad Industrial; el dominio de mi inglés es básico al igual que mi salario. quisiera saber que posibilidades hay de irme a trabajar y estudiar al mismo tiempo para mejorar el inglés y ejercer mi carrera para obtener un mejor futuro. soy casado aun no tengo hijos, mi esposa tiene 25 años de edad y también es ingeniero petroquímico,

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