Emigrar y trabajar en Australia sin morir en el intento (I)

Irse a un país desconocido para buscarse la vida siempre es un reto, aunque también se puede ver como una oportunidad. Australia recibe muy bien a turistas y profesionales cualificados. Aquí te damos unas cuantas pautas si te planteas emigrar y trabajar en este país asiático.

MADRID.- El mercado laboral y la economía en España están muy complicadas, por lo que muchas personas están recurriendo a otros países para aprovechar una estancia en el extranjero que les dé trabajo y nuevos horizontes. Australia, a miles de kilómetros de España, puede ser una gran oportunidad. (Acceder a la segunda parte)

¿Qué es lo primero que se pasa por la cabeza cuando se piensa en Australia? Capital: Sydney; koalas, canguros, boomerangs, Cocodrilo Dundee, Russel Crowe y Nicole Kidman… ¿verdad? Pues bien, vamos a descubrir un poco más este gran país y la forma de llegar a él sin morir en el intento. (Por cierto, la capital de Australia es Camberra, no Sydney).

Qué es Australia

Australia es un país continental ubicado en el sur de Asia, con una extensión mayor que la de Europa y una población de aproximadamente 23 millones de habitantes. Sí, mucha tierra para tan poco habitante. Tranquilo, la mayor densidad de la población se concentra en la costa. El centro del país es un inmenso desierto árido. Aun así, existen poblaciones por casi todo el territorio como Alice Springs y la Isla de Tasmania.

En el país existen diversos climas según la zona, unos más cálidos, algunos continentales y otros más tropicales. Ten en cuenta que estamos hablando de un país del tamaño de un continente, así que las distancias entre las principales ciudades que la conforman son considerables con sus largos trayectos y zonas horarias. Australia empezó siendo una colonia del imperio británico entre el siglo  XVI y XVII, utilizada como cárcel para presidiarios hasta que fue poco a poco colonizada logrando su independencia (26 Enero/ Australian Day). Hoy en día es una fuerte potencia económica en auge en Oceanía.

Las mayores ciudades que hay en Australia son Sydney , muy cosmopolita, Gold Coast, un gran enclave turístico y paraíso de los surfistas, la cultural Melbourne, con su clima tropical, Brisbane, una ciudad en auge económico, Perth en la costa oeste y la singular Cairns. La árida Alice Springs ocupa el centro del “outback”. El idioma oficial es el inglés (británico), usado en toda la región. Así que más te vale aprender lo básico antes de poner un pie en la tierra de canguros.

Cómo entrar en Australia

Existen diferentes tipos de visados para entrar en el país: Turista, Sponsorship Visa, Student Visa, SkillWorking Visa, HolydayWorking Visa. Cada uno tiene sus diferencias.

Visa de Turista. Te permite estar en el país durante 3 meses, prorrogables, debes solicitarla para entrar (esto no es la UE). La puedes conseguir desde la web del gobierno australiano o desde tu propia agencia de viajes (son 5 minutos, es barato y fácil). Esta visa sólo te permite entrar, no puedes trabajar con este visado. Puedes extender la duración de este visado al finalizar los 3 meses (o sencillamente puedes salir y volver a entrar como turista otros 3 meses).

Sponsor Visa. El sueño de todo emigrante. Sencillo. Una empresa australiana te contrata (esponsoriza) desde tu país de origen y entras al país contratado. Vamos, que la empresa te hace los papeles y puedes quedarte en Australia el tiempo que estés trabajando con esa compañía.

WorkingHolyday Visa. Es una visa poco común en muchos países. Sirve para que puedas pasarte unas vacaciones trabajando en Australia. Existen muchas granjas donde ofrecen la posibilidad de trabajar a cambio de comida y alojamiento durante la temporada de recolecta, ideal para trotamundos. Sí, como un visado “año sabático” con el que entras al país en plan mochilero y te permiten tener trabajos ocasionales y sencillos para que te puedas pagar el recorrido por todo el continente durante tus vacaciones de verano, o si eres un viajero en busca de aventuras, sea cual sea tu opción. Esta visa no es aplicable para españoles, pero sí para viajeros de otros países.

SkillWorker Visa. Bien, este es un visado interesante. Estamos ante un gran país que solicita demanda de profesionales altamente cualificados en diversos sectores económicos, como el sanitario. Es un visado al que puedes optar si tu profesión está dentro de un listado de profesiones solicitadas en Australia (lista SOL). Si tu profesión está en esa lista (échale un vistazo antes de nada), puedes solicitar el visado a través del gobierno australiano y sus embajadas. Puedes buscar trabajo de tu sector en el país, o ellos ya te ponen en contacto con tu futuro empleador y te asesoran sobre dónde está necesitada tu profesión. Está muy bien si trabajas en el ramo de la ingeniería informática y toda la rama del sector sanitario. Sólo te piden un nivel básico de ingles y, si no lo tienes, tranquilo, ya que ellos se encargan de tu educación en la lengua inglesa. Lo dicho, si eres un doctor mal pagado en la sanidad española… ¡Australia te quiere!

Y, por último y más importante, la opción más utilizada: el visado de Estudiante.

Student Visa

Australia es un país que ha convertido su educación en una fuente de ingresos al igual que hace con el turismo. Vende formación. Es por ello que tienen un visado de estudiante que te permite estar allí lo que dure el curso/carrera que hagas y te otorga un permiso de trabajode 20 horas semanales para que puedas costearte tu estancia o pagar tu carrera. Es la opción más usada por los emigrantes, una vez puedas entrar en el país, a estudiar, y trabajar a tiempo parcial. Así se puede ganar tiempo para terminar los estudios, hacer contactos y que una empresa te esponzorice o contrate y te haga los papeles para quedarte con la sponsorship visa o resident visa. O puedes hacer otro curso y extender el visado de estudiante.

Para conseguir este visado necesitas cursar estudios de alguna universidad o centro oficial de Australia que esté homologado y registrado en su ministerio de educación (CRICOS). Estudiar inglés también es válido para este tipo de visa, es más, se puede conseguir este visado incluso para escuelas de surf. Sí, has leído bien, puedes entrar y trabajar en Australia mientras aprendes surf, capoeira o mua-thai.

No obstante, para conseguir esta visa son necesarias 4 cosas:

1. La carta de admisión de la escuela/curso que vayas a realizar (COE) previo pago de la matrícula.

2. El certificado de tu nivel de inglés (IELTS). Es una prueba que te piden muchos centros para que puedas estudiar sus cursos. Tienes la opción de realizarla desde España a través del British Council (250 euros aproximadamente). Obviamente no es necesario si vas a estudiar inglés e incuso se puede viajar a Australia a estudiar para sacarte el IELTS. Si apruebas, te quedas para hacer otro curso.

3. Examen médico. Si hay una cosa que temen los australianos es la tuberculosis. Odian la tuberculosis. Es por ello que el departamento de inmigración te obliga a hacerte una prueba médica y una radiografía en sus centros registrados para comprobar que no sufres enfermedades graves ni que vas a aprovecharte de su sistema sanitario. No te preocupes, es un mero trámite. Es como una prueba médica rutinaria, una placa del pecho y una muestra de orina.

4. Seguro médico. Es necesario que contrates un seguro médico durante el tiempo que vayas a estar en Australia. Lo puedes solicitar a través de MEDIBANK, que es algo así como la seguridad social de Australia, puedes consultarlo en su web. También hay otras instituciones que te dan el seguro médico. Cuesta aproximadamente unos 24 dólares por mes.

Estas son las cosas esenciales que te pedirán en la embajada para tramitarte el visado (previo pago de los 430 euros de tasas). Aunque debes tener en cuenta que los australianos no son tontos y podrán pedirte información sobre tu expediente laboral, cuentas y datos bancarios con el fin de averiguar si de verdad vas al país a estudiar y si tienes suficientes recursos para hacerlo. En la embajada de España son muy muy conscientes de cómo está la situación laboral y se huelen la picaresca. La última palabra la tiene el agente de inmigración (Key Officer) que revisará e investigará tu caso y dictaminará (sin posibilidad de réplica o reembolso, es decir, tu dinero se lo quedan en cualquier caso) si se te concede el visado de estudiante o no.

En cualquier caso, no hay que desanimarse, ya que siempre se puede entrar en Australia como turistas y obtener la student visa dentro del país. Se llama hacer el visado on shore. Por cierto, si la idea es quedarse en el país permanentemente siempre está la opción de casarse con un(a) australiano(a) y obtener la residencia.

En España existen algunas agencias gratuitas que te ayudan y asesoran con el papeleo y los trámites de tu visado y te facilitan mucho las cosas una vez has llegado. (Acceder a la segunda parte)

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