Qué ver en Estambul en tres días

Proponemos una completa guía pasa saber qué ver y qué hacer en Estambul en 3 días.
Vista artística de Santa Sofía | Foto: Turismo de Turquía
Vista artística de Santa Sofía | Foto: Turismo de Turquía

En este reportaje te mostramos qué ver y qué hacer en Estambul en 3 días, una de las principales capitales de Turquía, a medio camino entre Europa y Asia. Cuando el viajero pone sus pies en Estambul por primera vez, percibe que se encuentra en un lugar singular, quizás único en el mundo, ya que sus construcciones aúnan las peculiaridades propias de Oriente y Occidente de una manera deliciosamente armoniosa, combinando al mismo tiempo pasado y modernidad.

Y es que son muchas las circunstancias que han hecho de esta ciudad turca un sitio diferente, especial, aunque el turismo la ha machacado un poco en los últimos años. En primer lugar, la incomparable ubicación geográfica de Estambul: entre Europa y Asia (es de las pocas ciudades del mundo construida sobre dos continentes), a orillas del estrecho del Bósforo, que une las aguas del Mar Negro con las del de Mármara, y del Cuerno de Oro. Estambul reúne e integra magníficamente la tradición milenaria oriental con el bullicio y las comodidades de una urbe llena de vida, al más típico estilo europeo.

Puente sobre el estrecho del Bósforo | Foto: Turismo de Turquía
Puente sobre el estrecho del Bósforo | Foto: Turismo de Turquía

El otro atractivo principal es su extraordinario legado histórico. En este sentido, Estambul guarda entre sus muros los restos de tres grandes imperios (romano, bizantino y otomano), de los cuales fue su capital. Esto le da a Estambul un formidable y variado patrimonio artístico y cultural, donde destacan sus palacios y mezquitas, como el de Topkapi o la Mezquita Imperial de Suleymaniye; sus monumentos y sitios históricos, como la Torre de la Doncella o la Plaza del Sultán Ahmet; sus museos y centros culturales, como Santa Sofía.

Pero Estambul no es sólo cultura. La ciudad ofrece un amplio repertorio de lugares de ocio, recreo y diversión donde el viajero podrá deleitarse en la contemplación de parajes extremadamente bellos, disfrutar con su deporte favorito, como el golf y la navegación, o perderse entre los misteriosos entresijos de la noche estambuliota.

Basílica de Santa Sofía de Estambul

El primer lugar que ver en Estambul para el viajero es la Plaza del Sultán Ahmet, en la zona europea de la ciudad y que se encuentra flanqueada por dos de los grandes tesoros de la urbe: la Basílica de Santa Sofía y la Mezquita Imperial del Sultán Ahmet o Mezquita Azul.

Con el nombre de Museo Ayasofya se conoce hoy en día a la Basílica de Santa Sofía, construida por Constantino el Grande en el siglo IV y reconstruida en el VI por el emperador Justiniano. Fue el centro del Imperio Bizantino durante casi mil años y sus muros han sido testigos del discurrir de una historia a la que no ha podido sustraerse, puesto que varios terremotos han dañado sus bóvedas, sus reliquias fueron saqueadas por los cruzados y sufrió como ninguna otra construcción la decadencia de Bizancio. La crisis económica que asoló el último periodo del imperio repercutió en su abandono. Cuando los turcos conquistaron Constantinopla, la Basílica de Santa Sofía fue reconvertida en mezquita y, desde 1931, alberga un museo. Considerada por muchos como uno de los edificios más asombrosos del mundo, la colosal cúpula de Santa Sofía se eleva hasta los 55 metros del suelo, con un diámetro de 31 metros. La basílica cubre una superficie de 1,6 hectareas y constituye un lugar ideal para perderse contemplando los delicados mosaicos bizantinos que custodia.

Basílica de Santa Sofía | Foto: Turismo de Turquía
Basílica de Santa Sofía | Foto: Turismo de Turquía

Frente a Santa Sofía, rivalizando en esplendor, se levanta la Mezquita Azul. Su nombre proviene de los azulejos de Iznik azules y blancos que recubren su interior. Destaca la majestuosidad de sus seis estilizados minaretes, erigidos junto con el resto del templo entre los años 1609 y 1616.

Los jardines y arboledas, junto con las casas de madera adyacentes a la Plaza del Sultan Ahmet (especialmente las de la calle Sogukçesme), conforman un lugar recomendable para pasear y evadirse de la rutina diaria. En esta zona, entre otros monumentos dignos de mención, destacan los restos del antiguo Hipódromo, el Obelisco de Teodosio, la Columna Serpentina de bronce y la Columna de Constantino.

El Palacio de Topkapi

Pero continuemos el recorrido para ver los lugares más relevantes de Estambul. Otro de los edificios emblemáticos de Estambul es el Palacio de Topkapi, situado detrás de Santa Sofía, sobre un cabo que contempla la unión del Cuerno de Oro con el estrecho del Bósforo. Esta edificación fue residencia de sultanes y de sus cortes.

El complejo del Palacio lo forman una amalgama de patios y edificios. El primer patio, en su acceso exterior, es un precioso jardín arbolado. A la derecha del segundo patio, cercado por cipreses y plátanos, se alzaban las cocinas del palacio, hoy convertidas en galerías donde se expone la colección imperial de cristal, plata y porcelana china. A la izquierda se encuentra el Harén, el lugar en el que se alojaban las mujeres, concubinas e hijos del sultán. Actualmente, el tercer patio contiene la Sala de Audiencias, la Biblioteca de Ahmet III, una exposición de las vestimentas imperiales que llevaban los sultanes y sus familias, las famosas joyas del tesoro (entre las que destaca el diamante Kasikci, de 81 kilates), y una colección de miniaturas de los manuscritos medievales.

Pasillo del Gran Bazar en Estambul | Foto: Turismo de Turquía
Pasillo del Gran Bazar en Estambul | Foto: Turismo de Turquía

El Palacio de Topkapi es un lugar que emana cultura. En el centro de este santuario se dispone el Pabellón del Manto Sagrado, que custodia las reliquias del Profeta Mahoma. Y dentro del primer patio del Palacio se encuentran los Museos Arqueológicos, compuestos por dos secciones diferentes: el Museo de Antigüedades, donde está el sarcófago de Alejandro, además de numerosos tesoros griegos, bizantinos y romanos; y el Museo del Antiguo Oriente, que alberga recuerdos de las civilizaciones sumeria, babilónica, asiria, hatti e hitita.

Mezquita imperial de Suleymaniye

A no mucha distancia de Topkapi, en la orilla occidental del Cuerno de Oro y sobre una colina, se erige el más bello de los edificios religiosos de Estambul: la Mezquita Imperial de Sleymaniye. Este edificio religioso fue construido entre los años 1550 y 1557 por Sinán, reputado arquitecto otomano, que dotó al complejo de una solemnidad majestuosa. Destaca el gran tamaño de sus proporciones, como su cúpula de 27 metros de diámetro y sus 54 metros de altura, y merecen especial mención los cuatro minaretes que parecen ascender sin fin desde las cuatro esquinas del patio.

Si por fuera la Mezquita Imperial de Sleymaniye impresiona, su interior no desmerece en absoluto, ya que en él sobresalen el mihrab (nicho para la oración) y el mimber (púlpito), construidos en mármol blanco finamente cincelado, así como sus vidrieras. De nuevo en el exterior es digno de visita el mausoleo de Solimán el Magnífico y su esposa Roxelana.

Qué hacer en Estambul

La historia y la cultura no son las únicas distracciones que brinda Estambul a sus visitantes. La ciudad dispone de una completa y variada oferta de lugares y centros de recreo y diversión en los que hacer múltiples actividades. Los amantes de la vida nocturna encontrarán en los barrios de Harbiye y Taksim los conocidos gazinos, locales nocturnos típicos de Turquía en los que se pueden escuchar canciones populares y descubrir las sugerentes danzas tradicionales del Oriente mientras se degusta la cena.

Barrio de Ortaköy en Estambul | Foto: Oficina de Turismo de Turquía
Barrio de Ortaköy en Estambul | Foto: Oficina de Turismo de Turquía

Kumkapi, Ortaköy o Beyoglu son también excelentes zonas de esparcimiento, con innumerables tabernas, restaurantes, bares y pubs. En ellas se pueden saborear muchas de las sabrosas comidas y bebidas que componen la gastronomía turca, como el típico kebab o el raki, una especie de anís que se bebe acompañado de agua y que se conoce popularmente como leche de león.

El Bazar Cubierto o Gran Brazar, situado en la ciudad antigua, constituye un auténtico laberinto de calles y pasadizos donde se emplazan alrededor de 4.000 tiendas en las que se puede encontrar de todo, desde alfombras o prendas de cuero hasta joyas o especias. El comprador deberá aprender aquí el arte del regateo para obtener buenos artículos a precios ventajosos.

Hoteles en Estambul

Estambul se encuentra repleta de hoteles de todos los tipos y precios. La elección que realices del hotel para tu estancia en la ciudad dependerá de lo cerca que quieras estar de los monumentos principales o de tú interés por alojarte en un barrio conreto. A continuación, te dejamos el enlace para que accedas a los mejores hoteles de Estambul, clasificados por calidad, precio u otros criterios.

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